miércoles, 11 de mayo de 2022

 

 Himno nacional argentino.

  

Su creación

A pocos años de la formación de la Primera Junta de gobierno, la Asamblea Constituyente de 1813 (Asamblea del Año XIII) convoca el 6 de marzo de ese año a la creación de un himno que resumiera los ideales de la Revolución de Mayo y simbolizara lo que llamaba “el entusiasmo patriótico del pueblo”.

 

Los diputados Cayetano Rodríguez y Vicente López y Planes preparan, cada uno por su lado, una propuesta. Durante la sesión del 11 de mayo de 1813, López y Planes da a conocer su obra y obtiene el respaldo de la Asamblea, que finalmente la aprueba como "Marcha Patriótica" en una resolución que decía: “téngase por única marcha nacional, debiendo por lo mismo, ser la que se cante en todos los actos públicos”.

 

Al día siguiente se encargó componer su música a Blas Parera quien, según cuentan, en una sola noche terminó la partitura. Así nacía la “Marcha patriótica” que en sus versos proclama el nacimiento de la “nueva nación”.

 

Oíd mortales el grito sagrado

Libertad, libertad, libertad

Oíd el ruido de rotas cadenas

Ved en trono a la noble igualdad

Se levanta a la faz de la tierra

Una nueva y gloriosa nación

Coronada su sien de laureles

Y a sus plantas rendido un león.

 

Entre las medidas más importantes que la Asamblea del Año XIII adoptó se declaró la abolición de la mita y la encomienda, se suprimieron los títulos de condes, barones y marqueses, mayorazgos, escudos de armas, símbolos y distintivos de nobleza en las fachadas de las casas y el mayorazgo; se declaró la libertad de los hijos de esclavas nacidos luego del 31 de enero de 1813 (libertad de vientres), la supresión de los tormentos y la Inquisición. Mandó acuñar monedas de oro y de plata con el sello de la Asamblea, sustituyendo las efigies de los monarcas y el sol en el reverso, con las inscripciones “En unión y libertad” y “Provincias del Río de la Plata”; estableció el escudo nacional y declaró el 25 de mayo como fiesta cívica con el fin de “inmortalizar el día del nacimiento de la patria”.

 

La creación del himno nacional se integra a esta serie de medidas que la Asamblea se propuso encarar, a tono con los valores de progreso que proclamaba el iluminismo europeo, para simbolizar el inicio de una etapa que dejaba atrás la tiranía y la imprevisibilidad de los tiempos de la revolución y “abrir la época de la paz y de la libertad” (Manifiesto Inaugural), bajo uno de sus lemas de origen: la lucha contra la tiranía ("Oíd ¡mortales! El grito sagrado: ¡Libertad, Libertad, Libertad!").

Fuente